diseño empático

Diseño empático: entender para innovar


Por: Patricia Santillán

    experiencia usuarios contexto

    A lo largo de la historia, hemos construido infraestructuras, artefactos y sistemas para ampliar nuestras capacidades, configurar entornos y simplificar la cotidianidad de la vida diaria. Hoy en día, se han catalizado avances tecnológicos, cambiado procesos y expandido mercados. Sin embargo, la manera en la que cada una de las personas experimentamos nuestro entorno, interactuamos con un servicio o usamos un producto, se basa en la forma en la que percibimos los estímulos que recibimos.

    La percepción, lejos de ser fija, está constantemente influenciada por múltiples factores, desde la personalidad, hábitos y valores, hasta aspectos fisiológicos y circunstanciales (como el dormir mal, tener hambre) o elementos externos (como la iluminación o el ruido). La percepción moldea el comportamiento y ambos se convierten en nuestra forma de interactuar con el contexto, y así, se crea nuestra experiencia.

    En el proceso de diseño, es importante entender la interrelación entre lo que sea que estemos trabajando, la percepción y el comportamiento de las personas a las que va dirigido, para lograr diseños más integrales. Es esencial entender la experiencia de las personas y cómo se relacionan con su contexto, así como profundizar en la comprensión de la experiencia, los pensamientos y los significados que las personas –como individuos y como colectivo–le damos a nuestros mundos.

    Esta forma de abordar el diseño nos brinda beneficios concretos:

    Identificación de barreras
    La percepción y el comportamiento actúan como guías, señalando dónde se encuentran los obstáculos. Nos ayuda a reconocer dónde las personas enfrentan obstáculos o experimentan “puntos de dolor” a lo largo de su experiencia, proporcionando una dirección clara para abordar estos desafíos.

    Creación de diseños conectados
    Nos permite profundizar en los hábitos, valores y deseos de las personas. Esto nos da guía para diseñar marcas, productos y servicios que generen experiencias significativas y resuenen con las personas.

    Análisis de tendencias
    Las tendencias influyen y moldean las decisiones de diseño. Identificarlas nos permite analizar la forma en que las personas se expresan, interactúan y navegan las diferentes tendencias.

    Construcción de una comunicación poderosa
    Los mensajes deben ser comprendidos. Conocer a las personas nos permite comunicarnos de manera más efectiva con nuestros públicos objetivos. Observando cómo las personas procesan la información, aprendemos qué palabras y elementos de diseño evocan las reacciones deseadas y si la información está siendo entendida.

    Entendimiento del cuándo, dónde, cómo y por qué
    Esta perspectiva del diseño nos ayuda a crear herramientas que van más allá de lo verbal, capturando la esencia de la experiencia. Al observar las acciones de las personas, en lugar de basarnos solo en sus palabras, obtenemos una comprensión más profunda del comportamiento y la percepción.

    Un diseño integral y efectivo va más allá de la estética y la funcionalidad, implica entender la complejidad de la experiencia de las personas y adaptarse al constante cambio. Al considerar la percepción y el comportamiento, podemos diseñar marcas, productos, servicios y entornos que no solo satisfagan las necesidades prácticas, sino que también nutran nuestras vidas de manera significativa, a través de la empatía, la inclusión y la innovación.

    ¿Quieres crear diseños integrales y efectivos para tu negocio? Escríbenos y veamos cómo podemos ayudarte a lograrlo.