En la película de “Tiempos modernos”, el personaje interpretado por Charles Chaplin ve cómo su vida cambia al ser reemplazado en su trabajo por un artefacto mecánico. Si bien este largometraje es una crítica a la deshumanización de las personas, la idea de ser sustituidos por una máquina es un miedo que todavía muchos tenemos y que con la aparición de ChatGPT muchos lo estamos afrontando. 

ChatGPT es un auténtico boom en la comunicación digital. Nunca como ahora, habíamos podido interactuar de forma tan democrática con un modelo de lenguaje de inteligencia artificial. El chatbot de OpenAI no deja de sorprendernos por su capacidad para responder sobre cualquier tema. 

Sin embargo, su uso y, sobre todo, sus alcances nos llevan a preguntarnos: ¿qué tanto puede afectar ChatGPT al branding? 

Para contestarlo es necesario entender que en nuestra industria no existe el problema de qué fue primero, si el huevo o la gallina, aunque no sigamos una metodología lineal de trabajo, sí partimos siempre de un punto de fuga en común: la empatía. 

Porque gracias a la empatía podemos entender qué siente alguien más, qué piensa y qué desea. Al ejercer esta emoción, estamos construyendo la base sólida de cualquier sistema visual, verbal y sensorial de una marca. Mientras más comprendas a las personas, mejor expresas tus mensajes; empatía transformada en creatividad. 

Esto significa que ChatGPT está en realidad limitado a nivel creativo y que como tal depende de la originalidad y sensibilidad humana para tomar una dirección. De hecho, le preguntamos a la misma aplicación sobre este tema y esto fue lo que nos respondió:

“[…] Si bien ChatGPT puede ser una herramienta útil para generar inspiración creativa, aún requiere del aporte y la orientación humana para desarrollar y ejecutar ideas verdaderamente impactantes y efectivas. Los seres

humanos están mejor preparados para proporcionar pensamiento crítico, evaluar la viabilidad y relevancia de las ideas y comprender los matices emocionales y culturales que son esenciales en la marca

y el marketing […]”. 

Así, creemos que el mayor beneficio de ChatGPT  está en un terreno vecino al branding: el Growth Hacking. 

Para un growth hacker, el tiempo y la eficiencia son oro. Y ChatGPT  ofrece ambos. Un generador de textos tan avanzado como este, brinda un elevado número de contenidos que a la vez impulsan una mayor velocidad en el proceso iterativo de cualquier negocio. Dicho de otra forma, ChatGPT es una excelente herramienta para abrir y probar con contenidos nuevos caminos de crecimiento.

Entonces, ¿qué pasará con ChatGPT  en nuestra industria? 

Lo mismo que ha ocurrido con otras aplicaciones: ¡sumar! Debemos aprender a sacarle el mayor beneficio, más ahora que estamos lidiando con inteligencia artificial. Quizá en eso está el reto a la creatividad de ChatGPT , en saber cómo utilizar la aplicación. 

ChatGPT es responsivo, depende de nosotros, de nuestra iniciativa para guiarlo y aprovecharlo. Algo que en realidad es muy parecido a trabajar y desarrollar un concepto creativo, donde tenemos un punto de partida claro, pero vamos moldeando el camino conforme a lo que vamos necesitando. 

Por todo esto, es importante que valoremos nuestra capacidad para ser innovadores y empáticos. Finalmente, como descubre también Charles Chaplin en “Tiempos modernos”, no hay elemento más determinante para el futuro que la creatividad y su factor humano.